- Uno de los detenidos ya tenía antecedentes por hechos similares
- Los agentes localizaron en una nave gran cantidad de ramas de marihuana en fase de secado
El pasado mes de enero una dotación de la Policía Local, mientras realizaba funciones de regulación del tráfico en la pedanía de Valverde, percibieron un fuerte olor a marihuana y comprobaron que no se trataba de ninguna persona que estuviera consumiéndola en los alrededores.
Los agentes preguntaron a la dirección del CEIP de Valverde, donde se encontraban, y varios vecinos indicaron que el olor lo llevaban sufriendo varios días por lo que procedieron a realizar una batida por la zona y localizando el foco del origen en una nave.
Mientras intentaban averiguar al titular de la propiedad, llegó un hombre que aseguró tener parte del local alquilado para desarrollar su actividad empresarial de reparación de embarcaciones. Seguidamente este dio su autorización por escrito a los agentes para que accedieran a la nave. Una vez dentro, revisaron e inspeccionaron las instalaciones localizando una estancia adjunta cerrada con llave desde donde provenía el olor.
Al acercarse, los policías escucharon ruido en su interior, por lo que comenzaron a llamar a la puerta y, tras mucha insistencia, la abrió un hombre y una mujer. Comprobaron que se trataba de un cuarto de aperos sin elementos personales y tras realizar la inspección, localizaron dos habitáculos con gran cantidad de ramas de marihuana en fase de secado, además de diversas pantallas de calor, ventiladores y extractores destinadas al cultivo interior.
Dado lo acontecido, la mujer y el hombre, de 30 y 42 años, fueron detenidos y trasladados al Cuartel de la Guardia Civil de Santa Pola. Asimismo, las plantas encontradas se decomisaron.